25 noviembre 2010

JUEVES 25 DE NOVIEMBRE DE 2010


Hola Carlos, te cuento que soy un asiduo visitante de tu blog. Soy estudiante de biología, en especialidad ecología, de la Facultad de Ciencias Naturales y Museo de La Plata. Les quería contar a los lectores la verdadera situación de estas muertes para que no saquen conclusiones erróneas, como leí durante las muertes del invierno, y aportar un poco de conocimiento científico al tema. ESPERO, Y CUENTO, CON QUE PUBLIQUES EN EL BLOG ESTE TEXTO EXPLICATIVO QUE REDACTE.

Los animales mueren por un proceso biológico denominado eutrofización, que no es ni más ni menos que la falta de oxígeno en el agua. Esto se debe al exceso de desechos orgánicos, principalmente aguas servidas en este caso, en el río. Esto provoca que muchos descomponedores, y algas macro o microscópicas, consuman el oxígeno disponible en el agua provocando la muerte de los animales sensibles a la carencia. Por eso los más afectados son los de aguas poco profundas o que viven cerca de la costa, claros ejemplos son los bagres y los sábalos. Esto es muy normal, aunque no debería serlo, en todos los ríos con grandes asentamientos humanos en el mundo. No solo pasa acá, pasa en China, España, Japón y principalmente en Estados Unidos, principalmente en el Mississippi. A estas zonas afectadas se les denomina zonas muertas. Todos los años el aumento de la temperatura provoca el desarrollo desmesurado de estos organismos microscópicos que solo se ven fertilizados por los deshechos. En síntesis, quiero destacar el hecho de que mueren por falta de oxígeno y no de contaminantes. Lamentablemente estas situaciones van a ser cada vez más frecuentes e importantes ya que están asociadas al desarrollo humano y al desarrollo del agro, ya que todos los fertilizantes liberados en las plantaciones son llevados por las aguas subterráneas a los ríos donde convergen y aumentan su concentración. También ocurre naturalmente en cualquier laguna donde baje el nivel de agua y se acumulen demasiados consumidores de oxígeno, el mejor y más claro ejemplo es la laguna de Chascomús durante la sequía.

Respecto a los contaminantes, siempre estuvieron y definitivamente los más peligrosos, los metales pesados, están en el fondo y no van a desaparecer hasta dentro de cientos o miles de años y siguen acumulándose. Lo peor de estos contaminantes es que se acumulan en el medio ambiente y en los organismos que los ingieren. Hace muchos años existe la prohibición del consumo de sábalo en la provincia y casi nadie lo sabe. El sábalo, los bagres y los carpas son peces detritívoros, es decir, chupan el fondo, donde están concentrados los contaminantes, e ingieren la materia orgánica expulsando el resto, aunque los metales pesados quedan. Esto hace que todos los contaminantes se acumulen en el tejido animal, por eso son bastante gordos, grasosos, respecto a los peces sanos que viven aguas arriba. Cada animal de éstos, que alguien consume, significa que está acumulando los elementos más tóxicos de la contaminación ambiental en su organismo. Todos dirán en este momento – Yo comí carpas y no me pasó nada! Pero cuántos saben que sus problemas de presión alta, daños al cerebro, disminución de la fertilidad, problemas en los riñones, abortos, cáncer, artritis, problemas y degeneración del sistema nervioso, etc. están asociados a la cantidad de contaminantes en su organismo debido a la ingesta de estos peces??? NADIE, porque no es políticamente correcta su difusión. Y eso no es nada, los problemas en niños son muchísimos más graves.

Traté ser tan corto y conciso como el tema lo ameritaba, espero que los pocos que lean esto reflexionen acerca del consumo de ciertas especies y de lo que significa educar a la juventud correctamente en el impacto ambiental. Pensemos dos veces a la hora de usar una pila, una bujía o plomo de baterías, por ejemplo, a la hora de arrojarlos al río. Si alguien quiere comunicarse conmigo espero su contacto al mail
rodriweb@yahoo.com o en mi blog. http://mascotasexoticasmilsaponia.blogspot.com/

Un abrazo a todos los lectores.

RODRIGO BAHAMONDEZ

4 comentarios:

Anónimo dijo...

LA VERDAD MUY BUEN INFORME.. MUCHAS GRACIAS POR COMPARTIRLO CON TODOS NOSOTROS

Anónimo dijo...

Gracias rodrigo, particularmente me resulto muy claro e informativo.
Te quisiera agregar ademas que en los ultimos dias se han visto unas algas verdes casi fluorescentes, de las que suelen verse todos los años cuando empieza el calor

christian dijo...

Muy buena la informacion,ahora lo que me gustaria ver es informaciones creibles de parte de autoridades provinciales,es como si este tema no les importara y sin querer decir lo obvio, el agua del rio de la plata es la que tomamos,lamentable la falta de ocupacion de los politicos por el tema ambiental,siendo que es un capital importantisimo a mediano plazo ya no a largo plazo

Criadero de alimento vivo y mascotas exóticas dijo...

Sábalos, prohibidos

Comer sábalos del Río de la Plata sigue siendo peligroso, porque contienen altas concentraciones de hidrocarburos, metales pesados y sobre todo bifenilos policlorados, conocidos como PCB. Por esa razón, el director de Desarrollo Pesquero bonaerense, Mauricio Remes Lenicov, decidió mantener la prohibición de pesca, consumo y comercialización decretada en 2000.

Como se alimenta del barro, el sábalo busca los lugares con más material orgánico. Son los sitios cercanos a los efluentes cloacales, y también los más contaminados, según el monitoreo que realiza desde 1996 el Laboratorio de Química Ambiental de la Universidad Nacional de La Plata.

El PCB —prohibido en todo el mundo por ser cancerígeno y producir nacimientos con malformaciones—, persiste como refrigerante de los viejos transformadores de energía. ¿Cómo fue a parar al río? "Reclamamos a la Secretaría de Política Ambiental que fiscalice el vuelco indiscriminado de sustancias tóxicas en el río", señaló Remes Lesnicov a Clarín, quien dio a entender que hasta ahora no tuvo respuesta.

Fuente: http://www.clarin.com/diario/2006/05/25/sociedad/s-04103.htm